Dos hermanos tenían una hacienda ganadera en Estados Unidos y vieron la necesidad de marcar su ganado con colores para distinguir a cada animal. Esto lo lograron con una pistola a presión y bolas de pintura. Las marcadoras (así se les llamaba) se vendían en los catálogos agrícolas y también podían usarse para marcar árboles. Cuando comenzaron a jugar con estas herramientas, convirtieron esto en un hobbie, el cual después fue nombrado.
Fotos por: Giovanny L. Galvez
La práctica originalmente fue bautizada como National Survival Game, pues no era considerado un deporte en esa época, pero posteriormente se convirtió en el Paintball, deporte que nunca fue creado como una simulación de guerra, pues a pesar de que se practica en un campo parecido a la batalla, paradójicamente es el deporte más seguro a campo abierto del mundo, pues la seguridad en esto es primordial.
El paintball un deporte de estrategia y no de violencia, allí no se habla de matar al enemigo, ni de guerra o batalla. Se juega con marcadoras, más no se les llaman pistolas, y están cargadas de bolas de pintura; es un deporte de amor y compañerismo.
La pasión por el deporte nació con Oscar Toro hace 15 años. En Estados Unidos hacía un curso de capacitación de primeros auxilios en manejo de desastres, allí usaban el paintball para simular una guerra y cómo sería esa emergencia en la vida real. Uno de los torneos más importantes es el NXL, a este van los mejores equipos del mundo, el equipo WD’S de Pereira es el mejor a nivel nacional. Allí jugó Oscar, quién ahora además de ser entrenador de paintball, es profesor de Medicina en la Universidad de Manizales, y enseña trauma y reanimación pediátrica y de adultos.
“Más que un deporte es un estilo de vida, te enseña carácter, respeto y mucho autocontrol, esto es importantísimo porque este deporte no se trata de venganza, si tu juegas paintball con venganza es mejor que te dediques a jugar otra cosa”.
Explica Toro, apasionado por su deporte.
En el deporte hay categorías de juego, está el paintball táctico que se trata de simular una especie de combate, en donde los contrincantes tienen ciertas estrategias para jugar; hay otro que es el speed, de movimientos rápidos para impactar al contrincante y sacarlo del juego, este es el que entrena Oscar.
Otra forma de jugar es capturar la bandera que está escondida en alguna parte del campo o bien está al lado contrario del equipo, y la persona que la capture no se le puede disparar. Otra forma de jugar es con objetivos, una persona del equipo opuesto es el blanco, y todos deben ir a marcarlo. La última modalidad (la más común) se trata de eliminar todos los jugadores del otro equipo, el que se quede sin jugadores primero, pierde.
En speed juegan 10 personas divididas en dos grupos de cinco, dos de los jugadores rompen por derecha y dos por izquierda, y el corredor va en la mitad. En el campo están los “doros” (en la derecha). El doro es un triángulo inflable grande en donde el jugador se esconde y los “dumis” (en la izquierda). El dumi es un tubo grande y el jugador debe cruzarlo o “romperlo”, y el lugar del corredor es un cubo ubicado en la parte de atrás. En el juego se hablan en metros, así sabiendo la distancia, se ubica al oponente y se marca, por eso la estrategia principal del deporte es la comunicación.
“Es un deporte donde tú aporreas al otro, pero aunque le duele no se pone bravo, es de paz”.
Cuenta reflexivo Oscar, tras su gran careta negra.