El Hockey en Manizales va creciendo como espuma dentro de una taza de leche hirviendo. Entre estas montañas cafeteras, ha colonizado este deporte que llegó para quedarse. El hockey entre patines, pases, bloqueos y sus sticks, conocidos como palos, ha conquistado el gusto y el tiempo de mujeres y hombres de diversas edades que lo practican.
El hockey originariamente se remonta a gráficos egipcios y griegos donde se ve jugar hombres con palos golpeando una pelota. Pero el país que dio a conocer este deporte fue Inglaterra en el siglo XIX, donde además se fundó el primer club de Hockey. Creció rápidamente en Europa hasta que en 1908 se incluyó en los Juegos Olímpicos, llegando a América del Sur en donde Argentina es el país más destacado. En Colombia el deporte entró por aguas del Caribe y el Atlántico, hasta llegar a Bogotá donde se alojó a los departamentos de Antioquia y Valle del Cauca para tocar puertas cafeteras, Caldas.
En el club de hockey manizaleño FCM Rolling – iniciales de Fernando Marín Vélez (su fundador fallecido), Carolina su esposa y su hijo Mateo – fundado en el 2002, encontramos la historia de un equipo de 10 hombres entre los 16 y 38 años de edad, entre ellos estudiantes y profesionales que apuestan con riesgo y valentía a un deporte que lo exige. Fernadando fue promotor del deporte en la ciudad e incentivó en su familia el amor por el hockey, por ello actualmente, su esposa dirige el club del que también hacen parte sus hijos.
Mateo ha sido Selección Caldas en 3 oportunidades y se proyecta a futuro como lo deseaba su padre, sonríe y afirma:
Llegué al deporte gracias a mi papá, para construir un futuro juntos, como ser Selección Colombia y en esto he ganado una familia pues FCM Rolling es una ampliación de mi casa.
El hockey sobre patines tiene sus exigencias. “Esto requiere actitud de querer hacer las cosas y hacerlas bien. Como entrenador me exige aprender mucho y saber qué tengo y qué necesito, me ha construido mucho como ser humano”, expresa Juan Jacobo García, entrenador del equipo y portero de la Selección Colombia de Hockey y Manizales Hockey Club.
El deporte es costoso debido a los materiales que exige, por ello FCM Rolling es un club sin ánimo de lucro que se financia a partir del apoyo económico de los padres, lo que Carolina llama el auto subsidio que permite que los niños pequeños de categorías como Baby Hockey, de la cual es profesora, puedan llegar a categorías avanzadas como Mini, Sub-15 y Sub-20 donde logran destacarse como los chicos mayores.
La semilla del hockey esparcida por Jairo Palacios, fundador del hockey en Manizales y Carlos Alzate, entrenador e impulsor del deporte, sitúa a la ciudad gracias a los clubes FCM Rolling y Manizales Hockey Club como punto de reconocimiento y talento del deporte en el país. La ciudad se destaca por la práctica del hockey sobre patines y cabe resaltar el hecho de que Manizales posee uno de los mejores patinódromos de la región.
Jonathan Giraldo explica:
El hockey sobre césped se acerca a la idea del fútbol, mientras el hockey sobre patines, se asemeja al microfútbol por la cantidad de jugadores, además los espacios y los implementos que utilizan son diferentes.
La comunicación y compañerismo: ingredientes
Un partido de hockey sobre patines es sinónimo de rapidez y resistencia. Exige de los jugadores tener los cinco sentidos atentos, la mente en el juego y control de la adrenalina, la misma que es transmitida a los espectadores que desde la banca sienten el calor del juego y la ansiedad imparable. Emociones que se desarrollan en un lapso de 40 minutos aproximadamente por partido, con la presencia de 5 jugadores en cancha, incluyendo el portero, los cuales sobre patines de doble eje y los stick (palos) disparan la bola (chut) que deben introducir en la arquería. Un resultado que logran mediante la técnica de pases y bloqueos y la protección de rodilleras, canilleras y cascos.
La comunicación al interior del equipo es la clave imprescindible:
“Como somos tan pocos en la cancha la comunicación tiene que ser efectiva porque el movimiento es constante, puedes cruzar la cancha en segundos”, señala Jonathan. Además, son cruciales las posiciones: “Uno se siente bien con una posición, por ejemplo, me gusta ser defensa, pero en el hockey no hay una sola posición, todos atacamos y defendemos por la misma exigencia del deporte”, añade.
El ambiente que proporciona el deporte mismo permite que sea una práctica donde todos son pieza importante y la jerarquía es inexistente, lo que permite que el compañerismo sea evidente en cada jugada donde cualquiera puede ser goleador y así mismo responsable del triunfo, junto con la agilidad y atención del arquero quien representa el 70% del equipo.
Entre la defensa y el ataque los jugadores de hockey se mueven entre marcas individuales defensivas, parecidas a figuras geométricas como rombos y cuadros, que muestran al hockey como impredecible. Además, de la exigencia mental y la formación del individuo se potencia:
“El hockey te forma en valores, debes aprender a valorar el equipo y entender las diferencias entre las personas. Ayuda en la disciplina y la perseverancia”, cuenta Jonathan.
Carolina y otros chicos de la categoría mayor del club como Mateo, entrenan niños con el fin de transmitir los valores y la importancia del deporte que los ha llevado a ser Selección Caldas y Selección Colombia en varias ocasiones, participando también en diversos mundiales.
La historia del club FCM Rolling simboliza el resultado del trabajo en equipo y la pasión que se afianza en cada jugada, elementos que se reflejan en cada práctica y competencia. El hockey de estos guerreros se traduce en amistad sobre patines, que en cada disparo a la bola le aportan un granito al crecimiento del hockey en la región, un deporte que tiene mucho por ofrecer y al observarlo resulta tentador.