Las tradiciones y costumbres de Riosucio no solo se transmiten a través de su cultura, fiesta y palabra. También se comparten a través de sus sabores y sazón.
A base de maíz, panela y fríjoles, la gastronomía riosuceña ha logrado conservar los saberes y sabores de su pueblo, convirtiéndose en actividad indispensable, tanto para sus comensales como para quienes viven de esta actividad.
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Clemencia Largo, proveniente de Sipirra, comunidad del Resguardo Indígena Cañamomo y Lomaprieta, es una de las personas encargadas de conservar la tradición gastronómica riosuceña.
“Esta tradición viene de hace muchos años, de mis abuelas, de mi mamá, quienes me enseñaron desde que estaba en la escuela a los 8 años, y después empecé a vender a los 11 en la plaza con ellas”.
Chiquichoques, estacas, tamales son algunos de los deliciosos platos elaborados por doña Clemencia, los cuales han servido para alimentar durante años arrieros, campesinos y habitantes de la región.
Todos sus platos están basados en el maíz, un alimento con gran tradición e importancia dentro de la cultura indígena.
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