Texto por: Rafael Santander
Fotos por: Juan David Rivera Andres C. Valencia y Giovanni Galvez
Este 13 de enero, el penúltimo día de la Feria, se celebró la versión 15 de la carrera Downhill Urbano Manizales: mil trescientos metros de descenso desde el barrio Cervantes hasta la cancha de Arrayanes en la que los meses de preparación se ven reflejados en una ejecución de menos de dos minutos, un lapso de tiempo sumamente corto para los espectadores pero que para los y las riders, entre la adrenalina, la actividad intensa y la concentración profunda, se dilata en medio del mar de decisiones por segundo que deben realizarse en una pista con escaleras, giros y saltos de gran exigencia técnica yendo a máxima velocidad.
«Lo más complicado de la carrera es el wallride», comentaron la mayoría de los participantes. Conscientes de esto, en las categorías Junior y Damas, esta maniobra era opcional, aunque para Élite varones no tocar el muro con las llantas representaba una penalización de cinco segundos. «Toda la pista es de cuidado y el nivel de exigencia técnica es muy alto» declaró Felipe Rodríguez, mejor conocido como Huesos, secundado por María Fernanda Gómez, quien obtuvo el segundo lugar en su categoría.
Video tomado de Chiguiro
Esta complejidad es un orgullo para sus organizadores, «en este evento solo se participa con invitación», afirmó uno de ellos, Duván Ceballos, como argumento a favor del alto nivel de los competidores y, por ende, licencia para hacer una pista difícil. Esto no tardó en manifestarse, pues hubo retiros por caídas desde los primeros descensos de prácticas y asimismo, Juan Fernando Vélez, uno de los favoritos de la competencia, quien lastimado después de golpear el concreto en un resbalón, se montó de nuevo en la bicicleta para llegar con el brazo herido en medio de los aplausos del público.
Para la final de Damas, la dosis de drama la proporcionó Érika Guerrero con un mal aterrizaje en el último salto, unos metros antes de la meta. De esta categoría, Valentina Roa fue ganadora indiscutible, a quince segundos de la siguiente competidora.
En Élite varones la intensidad del evento fue aumentando después la marca del cuatro veces campeón mundial, Tomas Slavik, con un tiempo a superar de 01:31:41. Retiros y pausas por caídas, entre ellas de la terna de chilenos que tuvo grandes marcas en la ronda clasificatoria dejaron clara la inclemencia de este descenso Urbano Manizales y la tensión alcanzó su límite cuando llegó la hora del mejor clasificado, Sebastián Holguín.
Después de las interrupciones por caídas, en medio de un silencio nervioso, a través de la pantalla dispuesta en la cancha de Arrayanes, el público observó la salida del último competidor y cruzó los dedos para que pudiera atravesar la línea de meta. La tensión se iba relajando con cada suspiro de alivio después de cada obstáculo superado. La ansiedad se iba convirtiendo en euforia con cada metro avanzado.
La llegada de Sebastián Holguín a la cancha fue celebrada. Su último salto, aplaudido. Y la emoción de verlo atravesar la meta se tornó histérica ante el anuncio oficial de que por 38 centésimas de segundo, con un tiempo de 1:31:03, había superado Slavik y ganado así la competencia. En hombros del organizador, entre sus lágrimas y las de sus familiares, rodeado de una audiencia que corrió a felicitarlo, esta victoria se convirtió en celebración y este evento en uno de los más emocionantes de la Feria de Manizales.
Este deporte, también parte de nuestra Feria Alternativa, está lleno espectacularidad y riesgo, con el valor agregado de la plena consciencia y consentimiento de sus participantes. Aquí vemos una lucha por la vida en medio de la adversidad, un sobreponerse al riesgo a fuerza de voluntad y disciplina, cosa tan apetecida en estas fechas, un evento donde la emoción e intensidad son tan altas que ante su brillo sale a relucir la obsolescencia de otros.
Clic en las imagenes, para ver los mejores momentos del Downhill Urbano Manizales:
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