‘El Chavo’, el ciclista que sueña con llegar a los Juegos Paralímpicos

El ciclismo lleva el cuerpo al límite, pero la mente puede con todo, fue así como un joven enamorado de la bicicleta volvió a renacer para cumplir sus sueños.

Texto por: César Giraldo

Fotos por: Giovanny L. Gálvez

Róbinson Jaramillo Gálvez, o ‘El Chavo’ Jaramillo como lo conocen sus amigos, tiene el sueño de competir en los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020. El deporte lo práctica desde el 2010 como ciclista paralímpico, antes lo hacía de manera profesional, pero debido a un accidente no pudo  volver a participar en carreras del alto nivel.

En ese mismo año Jaramillo inició  su carrera como ciclista en el equipo GW Shimano de Antioquia, era el primer año que competía en las grandes carreras del país. Pero, el 28 de agosto del 2007, Jaramillo salió de su casa, en La Enea, faltando un cuarto para las 6:00 a.m.,  tomó la vía la Panamericana y una motocicleta que salía del sector industrial venía adelantando un vehículo, la moto invadió el carril de Róbinson y lo impactó de frente.

El accidente dejó facturas en la rotula, la tibia, peroné,  desgarre del plexo braquial en donde perdió la movilidad del brazo derecho. ‘El Chavo’ Jaramillo estuvo 15 días en sala de urgencias, una semana en cuidados intensivos y luego dos meses en casa. “Los médicos me decían que me demoraba seis meses para volver a caminar. Yo sin embargo insistía mucho, cuando tenía las citas con el ortopedista,  le preguntaba qué ejercicios podría hacer, fui como un poquito intenso con eso”, recuerda Jaramillo.

Aprender a caminar y manejar la mano izquierda fueron los retos que el joven caldense tuvo que superar durante su recuperación en el 2008. “Yo simplemente dije que son cosas que pasan y que son duras, no lo voy a negar, que al comienzo fue algo muy frustrante, pero nada, yo dije que la vida sigue y yo tengo que seguir luchando por mis sueños y por mis metas, y aquí estamos”, comentó Jaramillo.

[responsive-slider id=18972]

Los médicos le manifestaron al joven ciclista que era complicado que volviera a montar en bicicleta. Por las lesiones y la movilidad del brazo, pero Róbinson no creyó en el dictamen de los doctores y dedicó el 2008 a su  recuperación. La natación ayudó a que el deportista adquiriera mayor fuerza en su cuerpo, ya que durante sus meses de reposo se atrofiaron los músculos.

En el 2009 Róbinson comenzó a estudiar un técnico en sistemas y empezó a alejarse del deporte. Contemplar otras opciones de vida era el propósito del joven ciclista, hasta que en el 2010 Jaramillo se encontró con unos viejos amigos, con los cuales corrió profesionalmente,  y lo alentaron  a retomar el ciclismo.

“Me dijeron que me animara a volver a correr ciclismo paralímpico. No lo veía muy opcional porque yo quería era correr la Vuelta a Colombia, el Clásico RCN, correr fuera del país”, explicó Jaramillo. Uno de sus amigos prometió contactarlo  con el director técnico de la Liga de Ciclismo de Bogotá, para que Jaramillo volviera a competir profesionalmente  en los paralímpicos.

Jaramillo fue convocado por el técnico en  Bogotá parar observar cómo entrenaba el joven caldense. “Pero yo no tenía bicicleta, nada, y yo le dije deme otro tiempito, en 15 días me voy, entonces armé una bicicleta y mientras la iba armando (…) yo cogía la bicicleta de mi hermano [el ciclista, James de Jesús Jaramillo] y me iba”, relata Róbinson.

Retomando el ciclismo

Róbinson usa una prótesis que le recubre el brazo, y a la vez, esta le permite adaptarla al manubrio de la bicicleta. Al perder la movilidad en el brazo derecho implica que el peso del cuerpo recaiga en el izquierdo, es por ello que al pararse en los pedales, por largo tiempo, le genere dolor.

El Chavo estaba acostumbrado a jornadas de cinco a siete horas de entrenamiento diarias. Pero después del accidente su cuerpo no rendía igual y el joven ciclista comenzó a declinar sobre sí ir o no a Bogotá. “Cuando empecé no era capaz de pasar de la Licorera, no era capaz, un día estaba muy cansado, entonces me sentí muy frustrado”, recordó Jaramillo.

A pesar del cansancio, el dolor y la incertidumbre el joven ciclista se propuso en llegar hasta el sector de Sabinas, vía Manizales – Bogotá. “Cuando yo subí a Sabinas, supe que la mente puede con todo, uno puede ir sufriendo, puede sentir el dolor que sea, pero si uno se propone una meta y dice que es capaz de cumplirla, la cumple”, aseguró El Chavo.

Compitiendo por Bogotá

Luego de demostrar sus capacidades ante el técnico de la Liga de  Ciclismo de Bogotá, lo admitieron para conformar el quipo capitalino.

“YO EMPECÉ EN EL 2010, FUI A MI PRIMER NACIONAL Y EN LA CONTRA RELOJ HICE MEDALLA DE PLATA, ENTONCES DIJE QUE PUEDO HACER COSAS GRANDES”, RECUERDA JARAMILLO.

Al día siguiente el joven caldense compitió en la prueba de ruta y ganó la medalla de oro. “Me gustaría representar a mi departamento, me gustaría llevar los colores de acá, pero la falta de apoyo y la falta de garantías, hacen que eso no se dé”, expresó el caldense.

[responsive-slider id=18973]

Objetivos para el 2019

En el 2018 El Chavo comenzó los campeonatos nacionales en Cali, justas en donde ganó dos medallas de oro, y en el campeonato nacional de ruta logró dos medallas de bronce.

Ahora el joven ciclista se prepara para  participar el 10 de marzo en el campeonato mundial de pista que se realizará en Holanda. “Yo pienso que puedo hacer cosas más grandes y soñaría, ¿por qué no?, de poder estar el otro año en los Juegos Paralímpicos”, contó Jaramillo.

Otros datos de interés

En los Juegos Nacionales del 2015 Róbinson Jaramillo logró cinco medallas:

• Dos oros
• Dos platas
• Un bronce