Texto por Andres Felipe Rivera Motato
Fotos por: Giovanni Gálvez
El 24 y 25 de agosto de 2024, Chinchiná vivió la séptima edición del Festival La Greca, un espacio donde los murales, el graffiti, la música, el deporte y el circo se tomaron las calles de este municipio. Cada rincón del skatepark se llenó de color y energía, en una fiesta que sigue ganando terreno en la región, resaltando la identidad campesina y cafetera.
Este Festival, que nació hace siete años, mantiene vivo el legado del Paisaje Cultural Cafetero, buscando que las nuevas generaciones se conecten con sus raíces a través de expresiones urbanas y deportivas que retan los estereotipos y fortalecen la identidad, de los jóvenes.
La Greca, desde su origen, cuenta con un factor diferencial al resto de eventos en la región y la cantidad de manifestaciones culturales y deportivas que convergen bajo un mismo nombre. Colectivos y organizaciones artísticas encontraron en el Festival una oportunidad para generar conexiones, fortalecer la identidad juvenil y promover la inclusión. El evento también es una apuesta por un modelo donde el arte y el deporte son herramientas para el cambio social, impulsando la participación activa de la juventud.
Como parte del compromiso por conectar con la comunidad local, el Festival organizó talleres con las comunidades campesinas para identificar y proteger la biodiversidad en riesgo. Especies como el yaguarundí, el martín pescador y el guatín fueron protagonistas en los murales que adornaron esta versión de La Greca. Estos animales, vitales para el equilibrio del ecosistema, fueron representados en tonos de verde, amarillo y azul, colores que reflejan la cotidianidad y el entorno natural de las comunidades que viven en armonía con el paisaje cafetalero.
Arte puesto en la pared
Los encargados de dar vida a las paredes de Chinchiná fueron los artistas Mugre Diamante, Skore999 y Otis, quienes con su pintura llenaron de color y significado los espacios públicos. A través del graffiti y los murales, plasmaron historias donde la identidad cafetera de la comunidad se refleja en cada trazo. Ahora, algunas paredes del municipio cuentan una narrativa visual que conecta a los habitantes con sus raíces, creando un vínculo entre la tradición campesina y las expresiones urbanas contemporáneas.
La música para unir los parches
La programación del Festival ofreció algo para todos los gustos, reuniendo parches, colectivos y personas de diversas afinidades. Las presentaciones musicales abarcaron una variedad de géneros, desde la trova y la música andina, hasta el reggae, el rock, el metal, el techno, la electrónica, el rap y el punk. Cada rincón de este evento hirvió el café con sonidos que reflejaron la diversidad y la energía de las audiencias, creando un espacio donde diferentes culturas urbanas y tradiciones se encontraron para celebrar a través de la música.
A los traques en la pista de skate
La Greca, como punto de encuentro para los jóvenes de Chinchiná, también dio espacio a los deportes no convencionales que han ganado fuerza en el municipio. Las artes marciales mixtas, el roller, el BMX, el skate y el monociclo fueron protagonistas en la pista de skate, un lugar donde los parceros se reúnen para practicar y compartir su pasión. Este espacio se convirtió en el escenario perfecto para que las nuevas generaciones se expresaran a través del deporte, reafirmando construcción de comunidad.
Finalmente, la 7° edición de La Greca deja el rastro de un espacio de convergencia para los jóvenes de Chinchiná, donde las expresiones artísticas, deportivas y ambientales se entrelazan para fortalecer la nueva identidad del municipio. Este Festival, que aparte de homenajear la cultura cafetera, abre caminos para que las nuevas generaciones se apropien del espacio público y encuentren en el arte y el deporte una herramienta para transformar su entorno y dejar de lado la violencia.
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