Un matemático puede ser músico, un ingeniero pintor, un médico bailarín y un abogado actor, el arte no limita y su gremio puede llegar a ser grandísimo. El Gestival Cultural – Un Intercambio de Sentidos llega a su tercera versión y dentro de su programación hubo además de foros, conversatorios y talleres que incluían a la comunidad y el trabajo con ella desde la gestión y periodismo, exposiciones, películas y videoarte donde los asistentes interactuaron con el mundo audiovisual.
Este festival nace como una propuesta del profesor Jorge Alberto Forero en su asignatura llamada Producción Cultural, dictada en el programa de Gestión Cultural y Comunicativa. Los estudiantes se motivaron porque sentían la necesidad de realizar un evento propio de la carrera y desde el 2012 se sembró la semilla de lo que sería este evento abierto al público.
“El objetivo principal del Gestival es visibilizar el papel del gestor cultural y comunicativo en la sociedad tanto local como externa”, expresa Andrea Ospina quien pertenece al festival como miembro de comunicaciones.
Y aunque la cultura puede ser difusa, esta se compone de rasgos distintivos ya sean materiales, intelectuales o emocionales que caracterizan a una comunidad e incluye a las artes, modos de vida y derechos fundamentales. Es por esto que los gestores entran a jugar su papel como dinamizadores de procesos artísticos, tales como el teatro, artes plásticas, música y literatura, propiciando espacios para que se den esas expresiones; pero también se involucran en el trabajo comunitario y se distancian de las bellas artes para la reconstrucción de tejidos sociales. De esta forma la programación del Gestival le dio razón al “intercambio de sentidos” y le propuso al público manizaleño pensar la cultura.
El miércoles no solo bailaron los pies, también bailaron varias iniciativas que emprenden jóvenes en la ciudad a partir de sus conocimientos con el propósito de ayudar a comunidades vulnerables. Varios grupos como Ideamos Conciencia Participativa, Comunativa, Huertas Urbanas, CORPOENEA y La Burbuja Producciones, expusieron sus proyectos encaminados a un propósito en común: unir a la comunidad y crear escenarios de aprendizaje para respetar su territorio y hacer resistencia a aquellos agentes externos que destruyen su entorno y la naturaleza. A partir de allí un ingeniero, arquitecto, médico, matemático también puede ser gestor.
Aunque el Gestival Cultural tuvo exposiciones permanentes como Con/Tacto, Extraños Familiares, Los pelaos del Barrio, entre otras, proyectó dos películas y estuvo divulgando información en redes sociales, preocupa que la asistencia fuese tan baja teniendo en cuenta que Manizales es considerada ciudad universitaria con un crecimiento del 48% de estudiantes matriculados en los últimos 5 años. Para Andrea, la gente ya está inmersa pero no es consciente que está consumiendo, y con una preocupación inmensa de que los estudiantes no asistan a este tipo de eventos expresa:
“Los que estamos en el sector cultural ya estamos sensibilizados frente a los procesos artísticos y culturales. El objetivo es mostrarle a otras personas que uno no debe ser músico para ir a un concierto, que no tiene que ser trabajador social para ayudar a los demás, uno vive en una comunidad, tenga la profesión que tenga, escucha música, ve imágenes, va a teatro”.
Es así como el teatro se convierte en el protagonista del día jueves y se toma varios escenarios de las universidades públicas en Manizales, manifestándose a partir de palabras, expresiones faciales y corporales, sin olvidar la inclusión de niños con dificultades cognitivas.
Diego Alejandro Hernández, estudiante de Ingeniería Química, logró su espacio de descanso para reír un poco en la cuentearía y afirma: “He escuchado mucho sobre el Gestival, pero hasta ahora vengo a enterarme de qué tipo de eventos se realizan y me encanta, me encanta la promulgación de la lectura, la invitación a nuevos espacios en el que podamos salirnos de la cuadrícula en la que permanecemos muchos ingenieros”, además propone que la universidad considere la importancia de la creación de nuevas carreras inclinadas hacia las ciencias humanas. Ya por la noche, la oscuridad le dio entrada a la exposición de Videoarte donde el público interactuó directamente con varias pantallas y objetos que se encontraban en su entorno.
Durante el transcurso de la mañana del viernes, el cierre de la tercera versión del Gestival cultural tuvo a 5 invitados locales y nacionales quienes compartieron su opinión y experiencias en el arte y la cultura. Aunque el auditorio K de la Universidad Nacional no estaba a reventar, algunos de sus asistentes, entre ellos niños de colegios, lograron abrir una discusión en torno a la inversión del Estado en la cultura y el papel que juega el gestor. El periodista invitado Santiago Rivas intervino:
“El reto es entender a la cultura como un sistema que se modifica, donde los intermediarios se han ido eliminando. Por eso los gestores deben cumplir el papel de creador en el sistema de la cultura, no de intermediario”.
La motivación de los que están detrás de las bambalinas del Gestival Cultural, es continuar convocando a las personas, poder acercar a la gente a la cultura, hacer redes de organizaciones y visibilizar procesos que ya existen para que se puedan generar a largo plazo otros procesos. Así como lo afirma Andrea Ospina: “que se den cuenta que no es ir a la cultura sino que ellos mismos son la base de la cultura. Todavía vemos que se habla mucho de la cultura y se asiste muy poco a ella”.
Luego en la tarde, con un poco de lluvia y frío característico de la ciudad, se cierra oficialmente el festival con presentaciones en tarima de varios grupos musicales cargados de riqueza en sus géneros.
La ciudadanía juega un papel activo y el Gestival Cultural continuará cada año al servicio de la ciudad, por eso es gratuito para que la gente y las organizaciones participen y se logre un espacio de comunicación.